El retraso necesario antes de que la recompensa de un bloque pueda ser gastada por el minero que la recibió. Este período se establece en 100 bloques después del bloque minado, lo que equivale a 101 confirmaciones para la transacción coinbase. Durante este tiempo, los bitcoins recién creados en la recompensa de bloque no se pueden gastar. El propósito de esta regla es evitar complicaciones relacionadas con el uso de bitcoins de una cadena que más tarde podría quedar obsoleta. En efecto, ocurre que bloques válidos acaban siendo invalidados si otro bloque, a la misma altura, se incorpora a una cadena que tiene más trabajo realizado sobre él. Este fenómeno, conocido como reorganización, da lugar a la creación de un «bloque huérfano» o «bloque rancio», privando así al minero de los bitcoins contenidos en la coinbase del bloque abandonado. Si los bitcoins recién creados fueran inmediatamente gastables, cualquier transacción relacionada con ellos podría cancelarse retroactivamente, causando pérdidas a los titulares de estos bitcoins. Este escenario podría llevar a una cascada de cancelaciones de transacciones válidas, afectando así a todos los usuarios implicados en esa cadena de transacciones. El periodo de vencimiento es, por tanto, un mecanismo preventivo contra este riesgo. Al imponer un retraso de 100 bloques antes de que los bitcoins recién emitidos puedan utilizarse, impide que las monedas de los bloques que finalmente se invaliden circulen y afecten a otras transacciones. La probabilidad de que se produzca una reorganización a lo largo de 101 bloques es tan baja que se considera insignificante.