Por cuarto año consecutivo festejamos la activa participación de artistas y entusiastas en Premio B.Arte, un concurso único que abarca todas las expresiones creativas. Nuestro objetivo es acercar el arte y los creadores a Bitcoin y enlazar estas dos importantes comunidades: por un lado el ecosistema de las tecnologías descentralizadas que se encuentra en plena expansión y por otro lado la comunidad artística, siempre vanguardista, que abraza el giro copernicano que significa Bitcoin en la creación e intercambio de valor.
Este cambio de paradigma requiere de una nueva mirada que sólo los artistas pueden reflejar desde el aspecto simbólico.
Con mil cuatrocientas obras recibidas durante estos cuatro años y una comunidad activa, conectada y vibrante, Premio B.Arte demuestra una vez más que existen tantas formas de representar las ideas como creadores hay.
Conquistando nuevos territorios y explorando diversos lenguajes, aquí están los artistas de una nueva era donde la posibilidad de no repetir los errores del pasado radica principalmente en que cada uno de nosotros asuma su papel protagónico en este Restart!.
1° PREMIO USD 1.000 EN BITCOIN
Artista: BOSQUE GRACIAS
17°-El código como expresión
Artista: May Toyo
1°- El dinero fuerte
Artista: Jania Müller
2°- La inclusión financiera
Artista: Valentín Berardi
3°- El empoderamiento de las personas
Artista: Flo Montoya
4°- La descentralización
Artista: Juli Miranda
5°- La soberanía individual
Artista: Leo Puzzle
6°- Verificar vs Confiar
Artista: Exponential Tom
7°- El derecho a la privacidad
Artista: Saoro
8°- La escasez absoluta
Escenario:
Lugar: Un Ágora virtual, donde las mentes de Friedrich Nietzsche y Platón se encuentran para
debatir sobre un fenómeno moderno: Bitcoin.
Aparece en escena Platón, representante del idealismo y el orden cósmico.
Platón se sienta en una silla de piedra, observando el «mundo de las ideas». Levanta una ceja
mientras medita sobre Bitcoin.
Artista: Melisa Di Natale
9°- La certeza de las matemáticas
Artista: Melang
10°- Las transacciones anónimas
Artista: Leonidas Puzzle
11°-La libertad financiera
Artista: Ariel Presti
12°- La certeza del código
Artista: Mathielukart
13°- La auto custodia
Artista: Exponential Tom
14°- La libertad de expresión
Artista: Bernabé
15°- Los derechos individuales
En la era del silencio impuesto y cadenas invisibles,
se alza un eco resonante de códigos y perfiles.
Una chispa en la oscuridad, un pulso en la red,
es el latido de millones que ya no temen perder.
En laberintos de algoritmos y cifras infinitas,
encontramos en las matemáticas certezas exquisitas.
No más fe ciega en torres de marfil dorado,
verificamos, no confiamos, el poder ha cambiado.
Artista: Martín Mugnolo
16°- La identidad digital
1° PREMIO USD 1.000 EN BITCOIN
Artista: Don Roberto
Juego interactivo presentado durante Labitconf 2024. El público participante se sometió a las preguntas de un banquero que mediante un delirante multiple choice demostraba con humor que el sistema financiero no tiene sustento y la solución es BITCOIN
Tenemos el honor de presentar el libro que reune las obras seleccionadas y premiadas en Premio B·Arte ediciones 2021 y 2022, también presentamos cuentos inéditos de referentes del ecosistema y otros trabajos significativos de la criptocultura que estamos construyendo como comunidad y visibilizando desde la ONG Bitcoin Argentina.
Agradecemos las obras de cada creador, cada artista y cada concursante de Premio B·Arte por ser parte de este cambio de paradigma.
La Revolución Blockchain desde el Arte y la Literatura es un libro editado por Fundación Bitcoin Iberoamérica.
Artista: Saoro
8°- La escasez absoluta
Escenario:
Lugar: Un Ágora virtual, donde las mentes de Friedrich Nietzsche y Platón se encuentran para
debatir sobre un fenómeno moderno: Bitcoin.
Aparece en escena Platón, representante del idealismo y el orden cósmico.
Platón se sienta en una silla de piedra, observando el «mundo de las ideas». Levanta una ceja
mientras medita sobre Bitcoin.
Platón: «Nietzsche, me hablabas de una creación humana, Bitcoin, algo más que un ‘activo
digital’. Pero ¿qué sentido tiene este fenómeno en relación con la idea de la escasez absoluta?
Para mí, el mundo real es solo una sombra del mundo ideal, donde el bien y la justicia
prevalecen. ¿No te parece que esta escasez, basada en la tecnología, simplemente limita a las
personas a lo material?»
Una imagen se activa en la escena: aparece Nietzsche, defensor del poder personal y la
superación del ser.
Nietzsche ríe, jugueteando con una pequeña cadena de bloques dorada.
Nietzsche: «¡Ah, Platón! Como siempre, buscas el mundo perfecto, allá arriba, en tus “ideas”.
Pero el hombre superior que yo propongo no busca ideales abstractos; busca crear valor real
en el caos de este mundo. La escasez absoluta de Bitcoin refleja la voluntad de poder. 21
millones, ni uno más. Aquí no hay espacio para la inflación creada por instituciones que nos
debilitan. Esta es una decisión humana y fuerte, que marca un límite a la dominación de
aquellos que quieren controlar el destino de las masas.»
Platón: «¿Pero no crees que la escasez podría crear injusticia? Al limitar el acceso a este bien,
¿no estamos, acaso, potenciando las desigualdades?»
Nietzsche: «No. Aquí estás equivocado, viejo amigo. La verdadera justicia es empoderar al
individuo. Bitcoin es una forma de revaluar todos los valores, de destruir la centralización de
poder. Empoderar a las personas significa devolverles su libertad, su capacidad de
autodeterminación. Los bancos, los Estados… ellos representan el orden que tu República
idealizó. Pero, ¿y si esas instituciones son, en verdad, la moral de esclavos que nos debilita?
¡Con Bitcoin, el hombre toma su destino en sus manos!»
Platón: (Pensativo) “La escasez absoluta… Solo 21 millones de bitcoin, ni uno más. Es un
concepto que resuena con la idea de límites, de formas perfectas. Pero dime, Nietzsche, ¿cómo puede esta escasez funcionar en un mundo donde el deseo humano es infinito? El
apetito por el poder y la riqueza no conoce fronteras, ¿no es una contradicción?”
Nietzsche: (Sonriente, con tono irónico) “Ah, Platón, siempre el soñador. ¡Qué aburrido sería
un mundo sin límites! Si no hay una montaña que escalar, ¿cómo sabrías que has llegado a la
cima? Bitcoin, con su número finito, es precisamente ese reto. Nos obliga a tomar decisiones:
cada transacción es un pequeño acto de voluntad, una afirmación del poder sobre el caos
financiero. ¿Quién necesita infinitud cuando puede poseer algo que todos desean y pocos
tendrán?”
Nietzche no disimula una sonrisa incipiente. Platón mira a un costado, pensativo.
Platón: «Dices que Bitcoin empodera a las personas. Pero, ¿puede un sistema basado en el
deseo de posesión y acumulación ser una verdadera forma de empoderamiento? En mi visión,
la justicia consiste en que cada ciudadano cumpla su función para el bien común.»
Nietzsche: «¡Ah, la vieja justicia platónica! ¡Qué aburrido suena! El empoderamiento de las
personas, a través de Bitcoin, es la creación de un nuevo tipo de ser humano. Uno que no está
subordinado a la política, sino que crea sus propias reglas, su propia economía, ¡su propio
sentido del valor! Empoderar significa despojarse de las cadenas del pasado, de las
instituciones que limitan el potencial del hombre. No es simplemente el deseo de posesión,
sino el deseo de libertad lo que impulsa este cambio.»
Platón: «Entonces, según tú, Bitcoin sería una herramienta que permite al individuo
trascender, en lugar de corromperse. Pero, ¿puede el ser humano trascender sin el orden del
bien común? Me temo que, sin dirección, el caos y la injusticia prevalecerán.»
Nietzsche (sonriendo): «Tal vez. Pero en el caos también hay belleza. Bitcoin no es solo una
moneda, es una revolución filosófica. Representa la posibilidad de que cada uno se convierta
en su propio maestro, de que las reglas no las dicte un ideal abstracto o una institución, sino
la propia voluntad del individuo.”
Platón (contemplativo): «Quizá, Nietzsche, haya algo que aprender de esta escasez absoluta
que mencionas. Pero todavía creo que sin un orden que trascienda lo individual, será difícil
crear una sociedad justa. Quizá Bitcoin es una herramienta poderosa, pero necesitará de
sabiduría para que no termine desvirtuando el alma del hombre.»
Nietzsche (con ánimos): «Me hablas de la necesidad de una dirección. No hay problema con
ello, todos dirigimos, el código administra. La claridad de las funciones también radica en su
escasez.”
Ambos pensadores siguen en el Ágora con sus ideas en la mente, cada uno reflexionando sobre
Bitcoin, desde sus diferentes perspectivas. Pero Platón tiene un as bajo la manga y una caverna
se manifiesta en el lugar.
Platón (pensativo, recordando su famosa alegoría): «Nietzsche, lo que describes me recuerda
a mi alegoría de la caverna. Los hombres, prisioneros en la caverna, solo ven sombras
proyectadas en la pared, creyendo que esas sombras son la realidad. Cuando uno de ellos es
liberado y sale al exterior, descubre la verdadera luz, el mundo tal como es. Bitcoin, según lo
que dices, podría representar ese destello que rompe las cadenas de aquellos que han estado
sujetos a una economía ilusoria, creada por instituciones que solo proyectan sombras de
valor. Pero, ¿estamos seguros de que la luz de Bitcoin no es otra sombra más?»
Nietzsche (con un brillo de intensidad en los ojos): «¡Exacto, Platón! Pero lo que tú llamas
sombras en la caverna, yo lo llamo las mentiras del poder. Los gobiernos, los bancos, todos
ellos son los guardianes que nos mantienen encadenados, haciéndonos creer que su control
sobre el dinero, sobre la emisión, es necesario. Nos hacen ver sus sombras como si fueran la
realidad. Bitcoin es ese rayo de luz que, al igual que tu prisionero liberado, nos permite salir
de la caverna y ver el mundo económico tal cual es: sin inflaciones manipuladas, sin
restricciones impuestas desde arriba. Con Bitcoin, el hombre deja de ser prisionero y se
convierte en su propio dueño.»
Platón (mirando hacia el fuego de la caverna): «Interesante, Nietzsche. Si Bitcoin nos lleva a
ver la verdad, nos saca de la ilusión del control de las instituciones. Sin embargo, en mi
alegoría, no todos los prisioneros están preparados para aceptar la luz del conocimiento.
Algunos prefieren quedarse en la caverna, donde las sombras son confortables y familiares.
¿Qué sucede con aquellos que no pueden manejar esta nueva realidad? ¿Con aquellos que,
al salir al exterior, son cegados por la luz y buscan refugio en las sombras del pasado?»
Nietzsche se pone de pie, firme en su convicción.
Nietzsche: «No todos los hombres están hechos para la libertad, Platón. Algunos preferirán
las cadenas, porque ser libres requiere asumir la responsabilidad de tu destino. El hombre que
evolucione será aquel que acepte esta verdad, que deje atrás las sombras para caminar bajo
la luz, a pesar de las dificultades. Bitcoin es una herramienta de empoderamiento
precisamente porque no todos la entenderán o querrán adoptarla. Pero aquellos que lo
hagan, se elevarán por encima del rebaño, más fuertes, más libres.»
Platón: «Entonces, según tú, Bitcoin es la clave para salir de la caverna y ver la economía y la
sociedad sin las distorsiones impuestas por el poder. Pero, Nietzsche, aún me pregunto si, al
salir de la caverna, no crearemos simplemente otra, una nueva ilusión. Bitcoin puede ser la
clave para liberarnos de las sombras del pasado, pero sin sabiduría, el poder de esta luz puede
quemar tanto como iluminar. ¿Puede el ser humano realmente crear un sistema que no sea
corruptible?»
Nietzsche (sonriendo): «Tal vez no. Tal vez siempre estaremos entre sombras. Pero Bitcoin, al
menos, es un paso hacia una verdad más cercana a la naturaleza del hombre. No pretende
ser perfecto, solo mejor que las cadenas que nos atan. Es la voluntad de poder en su forma
más pura: tomar el control de lo que es tuyo. Y aunque no todos lo acepten, aquellos que lo
hagan estarán más cerca de la luz.»
Platón: «Tal vez, Nietzsche, Bitcoin nos ofrezca la oportunidad de ver el mundo tal como es,
liberándonos de las sombras del pasado. Pero como en mi alegoría, no todos estarán listos
para aceptar la verdad. Sin sabiduría, el poder de esta luz puede quemar tanto como iluminar.»
Nietzsche: «¡Que queme! Que aquellos que no puedan soportar la verdad vuelvan a la
caverna. El verdadero empoderamiento no es para los débiles, Platón. Es para los que buscan
la verdad, aunque sea dolorosa. ¡Bitcoin es ese fuego que puede romper las cadenas!»
Platón mira la cadena de Nietzsche y observa la inscripción “Sólo 21 millones”. Procede a tomar
la palabra.
Platón: Nietzsche, no irme del tema de la escasez absoluta de Bitcoin. Con solo 21 millones
de bitcoin, es como si la caverna estuviera vacía. ¿Cómo podemos lograr que la gente
entienda este concepto?
Nietzsche: ¡Ah, Platón! La escasez es una idea fascinante. Recuerda, «lo que no me mata, me
hace más fuerte», pero cuando se trata de Bitcoin, quizás sea más bien «lo que no me da un
bitcoin, me deja más pobre».
Platón: Y el misterio de Satoshi Nakamoto… ¿Quién es realmente? Es como el mito de la
caverna. ¿Son las sombras en la pared los verdaderos 21 millones?
Nietzsche: ¡Exactamente! Y en un mundo de Anonymous, todos somos prisioneros de
nuestras propias sombras. A veces siento que el verdadero desafío no son los 21 millones,
sino convencer a la gente de salir de la caverna.
Nietzche no puede evitar contenerse…
Nietzsche: Te diré, Platón, la pizza que compré con mis satoshis fue una experiencia
trascendental. Pero como dirías, “El banquete de los ideales” se vuelve muy costoso cuando
los precios son en fiat.
Platón: ¡Ah! Pero no olvides que “la tragedia fiat” es el camino de muchos. La gente necesita
ver que el oro digital es el verdadero sustento de nuestras almas.
Nietzsche: ¡El oro digital! No sé si es más hermoso que un honey badger, pero definitivamente
es más escaso. Tal vez deberíamos llamarlo «El honey badger de las monedas».
Platón: Claro, así podríamos discutir «El estado de la escasez» y «Demasiado humanos para
tener Bitcoin», donde la falta de confianza nos lleva a aferrarnos a lo conocido.
Ambos sonríen, aunque a Nietzche no le gustó mucho el juego de palabras con sus libros. Platón
continúa, es su momento…
Platón: Nietzsche, ¿no te parece que con el halving, la gente debería estar más consciente
de la escasez? Pero parece que están demasiado ocupados en la “matrix” del fiat.
Nietzsche: Por supuesto, Platón. Es como “El origen de la tragedia fiat” donde los humanos
no comprenden que cada halving es un paso más hacia la verdad: el fin de la inflación.
Platón: (con risas) Veo que te ha gustado la connotación con la tragedia… Entonces,
¿deberíamos tener una charla sobre “El bien y el mal en la economía cripto”?
Nietzsche: ¡Exactamente! Y podríamos titularla “Así habló Satoshi”, donde discutimos cómo
la economía fiat nos ha fallado.
Nietzsche: En un mundo donde todos luchan por obtener un poco de bitcoin, ¿no es irónico?
Tal vez deberíamos escribir “El camino de la escasez absoluta”.
Platón: ¡Oh, eso suena profundo! “El camino del bien en la era del oro digital”. Y a la gente le
encantaría escuchar cómo cada halving es un nuevo comienzo.
Nietzsche: Y la verdad detrás de Anonymous… ¿no es un poco como la alegoría de la caverna?
Todos ven sombras de lo que es Bitcoin, pero pocos saben que los 21 millones son el
verdadero tesoro.
Platón: Exactamente, Nietzsche. Quizás deberíamos decir que el verdadero filósofo es el que
ve más allá de la caverna… y se da cuenta de que puede comprar pizza con bitcoin.
Nietzsche: El verdadero filósofo es que dice “Dios ha muerto… pero Satoshi, no”
Platón: ¿Seguro? No se sabe nada de él.
Friedrich suspira.
Nietzsche: “Don ́t trust, verify”
Artista: Bernabé
15°- Los derechos individuales
En la era del silencio impuesto y cadenas invisibles,
se alza un eco resonante de códigos y perfiles.
Una chispa en la oscuridad, un pulso en la red,
es el latido de millones que ya no temen perder.
En laberintos de algoritmos y cifras infinitas,
encontramos en las matemáticas certezas exquisitas.
No más fe ciega en torres de marfil dorado,
verificamos, no confiamos, el poder ha cambiado.
Descentralizamos sueños, tejemos puentes sin fronteras,
la inclusión financiera es más que quimeras.
Es la mano extendida al que nunca fue escuchado,
es dinero fuerte en bolsillos antes vaciados.
La soberanía individual ya no es utopía lejana,
cada clave es un tesoro, cada individuo una llama.
La auto custodia es el escudo que empuñamos,
en la escasez absoluta, nuestro valor reclamamos.
Anónimas transacciones cantan libertad,
en susurros cifrados encontramos verdad.
El derecho a la privacidad no es concesión ni mito,
es piedra angular en este camino infinito.
El código como expresión, arte en líneas y bucles,
es poesía en movimiento, es rebelión sin cruces.
La identidad digital florece sin permiso,
somos arquitectos de este nuevo paraíso.
La certeza del código es fe en lo inmutable,
en un mundo volátil, es ancla indestructible.
Los derechos individuales brillan sin opresión,
en cada bloque forjado, hay revolución.
Libertad financiera, alas sin condición,
elevamos el vuelo hacia nuestra propia canción.
La libertad de expresión encuentra su canal,
en bits y bytes, narramos nuestro final.
Empoderamiento es semilla que germina en cada mente,
es saber que juntos cambiamos la corriente.
En esta trama colectiva, somos hilos de ilusión,
tejiendo juntos el futuro, labrando transformación.
Este es el manifiesto de un mundo renacido,
donde el valor es compartido y el control es abolido.
Un canto al horizonte que se abre ante nosotros,
Bitcoin es la senda, el futuro es de todos.